GO Blog | EF Blog Mexico
Lo último sobre viajes, idiomas y cultura con EF Education First
MenuFolleto gratis

Disfruta de Singapur como un lugareño

Disfruta de Singapur como un lugareño

Este artículo está inspirado en el de Adriano Jeric, 4 maneras de conocer Singapur (publicado en los blogs EF Vietnam y EF Japón).

Se dice que las actividades favoritas de los habitantes de Singapur son comer e ir de compras, una vez que pones el pie en la Ciudad del León, es fácil ver por qué han perfeccionado ambas. Sin embargo, Singapur, que tiene aproximadamente la mitad del tamaño de Londres, tiene mucho más que ofrecer que tiendas y restaurantes: Echa un vistazo a nuestra guía, te ayudará a experimentar la famosa y emocionante diversidad que esta ciudad.

Come toda la comida

Haz lo que los singapurenses hacen mejor y recorre las deliciosas cocinas de la ciudad: prueba el dosa indio y siente la riqueza de todas las salsas y condimentos o, si tienes más inclinación por los sabores chinos, prueba el pollo con arroz de Hainan. Saborea la laksa, una sopa picante de noodles, para experimentar el sabor de Malasia. Haz una mezcla y visita un puesto de mamak para ver qué sucede cuando se unen la cocina malaya y la india para crear obras de arte como el roti Canai, el famoso pan plano. Ah, y si te mueres de ganas por algo dulce, prueba un alimento básico de la cocina de Singapur: kaya toast, una combinación celestial de mermelada de coco (que es el kaya), azúcar, leche de coco y huevos, todo servido con pan tostado.

**Bebe todo el café y el té

**

Es importante mantenerse hidratado mientras se hace turismo y se conoce la ciudad, y Singapur hace que este esfuerzo sea una auténtica (y deliciosa) alegría: hay dos palabras importantes que necesitas conocer, areteh (té) y kopi (café), puedes encontrar las dos bebidas en una kopi tiam, una cafetería, en la que hay una infinidad de formas de pedir estas bebidas tan populares. Mientras estás en ello, asegúrate de probar el Teh Tarik, la bebida nacional de Malasia, que se puede traducir como «té tirado». Sus ingredientes son sencillos, leche y té, pero la forma en que lo hacen explica a la perfección por qué se le llama té tirado: se vierte el té de una taza a otra y se repite el proceso hasta que la bebida queda espumosa. No suena especialmente emocionante al leerlo, pero es impresionante verlo.

Vive lo estrafalario

Haji Lane, en el barrio de Kampong Glam, es una visita obligada: este pueblo malayo convertido en ciudad hipster tiene una atmósfera divertida y ecléctica. Es una calle estrecha y corta, sin rascacielos, en la que hay un ambiente multicultural y artístico que hará que te olvides de que estás en una de las metrópolis más ajetreadas del mundo. La zona está repleta de tiendas únicas, restaurantes alternativos y cafeterías acogedoras perfectas para tomarse un descanso después de admirar la genial arquitectura, los coloridos murales y el atrevido arte callejero.

**Absorbe la modernidad

**

Tiong Bahru es actualmente el barrio de Singapur más a la moda, y está lleno de cafeterías (¡sí, más kopi!), librerías y galerías de arte chino anidadas entre viejos edificios chinos. Este moderno barrio es la mezcla perfecta del art decó de oriente y occidente, y la mejor forma de conocerlo es paseando por él por la tarde.

**Recorre la bahía que lo tiene todo

**

La zona de Marina Bay es realmente espectacular, tanto por el día como por la noche: se puede empezar desde cualquier punto, pero ¿por qué no tener una visión general del espectacular perfil urbano desde el Singapore Flyer, una de las norias mirador más grandes del mundo? Para hacer una foto genial, visita Merlion, la famosa estatua mitad pez, mitad león situada en el parque Merlion. Después, te recomendamos que vayas a los galardonados Jardines de la Bahía, un parche verde impresionante con sitios para hacer picnics, la cascada interior más alta del mundo, jardines verticales y más flores de las que puede manejar tu cuenta de Instagram. Ah, y no olvidemos que todo esto está rodeado de restaurantes, tiendas, museos, y «ese» edificio…

**Derrocha y date el baño de tu vida

**

El plato fuerte de Singapur es sin duda el Marina Bay Sands: un hotel de tres torres en cascada con una piscina de borde infinito de 150 m de largo en el piso 57. Seamos realistas, no puede haber un sitio más magnífico para darse un chapuzón. El Marina Bay también tiene clubs nocturnos, un casino, infinidad de tiendas y restaurantes, y un museo, por si te aburres de estar todo el día nadando con vistas.

**Admira la emblemática arquitectura

**

Singapur tiene algunos de los edificios más impresionantes del mundo, así que ten lista tu cámara: el Vertical Village, un proyecto de viviendas con bloques residenciales apilados, fue elegido como Edificio Mundial del año 2015 y se parece un poco a lo que ves cuando juegas al jenga. El Marina Bay Sands nunca deja de sorprender, ni tampoco el museo ArtScience, que para algunos parece una flor y para otros se asemeja a la mano de un robot. Y mientras interpretamos obras maestras arquitectónicas, no olvidemos el Esplanade, un centro de artes escénicas, que es básicamente un durián gigante o el ojo de una mosca. Si todavía te queda espacio en el teléfono o en la tarjeta de memoria, súbete al puente Helix y posa, dispara y comparte.

**Descubre la parte verde y salvaje de la ciudad

**

Puede que Singapur parezca una jungla de cemento, pero la ciudad está llena de espacios verdes que están a unos pasos de distancia. Puedes recorrer la ciudad y su historia en bicicleta (el parque fluvial Punggol, el cementerio Bidadari o el humedal Halus), admirar a pie emblemáticos parques y jardines (el Jardín Chino o el Parque Fort Canning), tomar el sol en alguna de las numerosas playas (Parque de la Costa Este), u observar la vida silvestre en su hábitat natural (Parque Jurong Bird, _Sungei Buloh,_o Chek Jawa).

**Ve de isla a isla

**

Sentosa es una hermosa isla turística, a menos de un kilómetro de distancia de la isla principal de Singapur. El nombre significa «paz y tranquilidad» en idioma malayo, pero Sentosa no está ni mucho menos dormida. Después de un corto trayecto en teleférico desde Singapur, podrás poner el pie en esta isla de cinco kilómetros cuadrados repleta de atracciones emocionantes, famosos parques temáticos y complejos turísticos. Aunque no todo es oferta de ocio, porque Sentosa tiene también su propia selva exuberante y dos kilómetros de playas de arena blanca que llenarán tu feed de Instagram en muy poco tiempo.

Imagen de Nicolas Lannuzel, Flickr / Creative Commons

Descubre Singapur con EFAprende Más
Recibe las últimas noticias sobre viajes, idiomas y cultura en nuestra newsletter GOSuscribirme